Para cualquier equipo informático, elegir la tarjeta gráfica es uno de los puntos más importantes pero no siempre su compra es fácil. El problema que nos encontramos es la amplia variedad de de modelos que existen en el mercado como puede ser la gtx 1650. Cada una de esas tarjetas cuentan con sus propias características y que para muchos usuarios son difíciles de entender. Para que este proceso de compra os resulte más sencillo, hoy queremos compartir con todos vosotros algunos consejos que os pueden ser de gran ayuda en todo este proceso.
Presupuesto con el que contamos
Lo primero que debemos tener presente es el presupuesto con el que contamos, estableciendo un rango del que no deberíamos salirnos. Hay que destacar que en muchas ocasiones nos encontramos que por unos pocos euros más podemos conseguir una tarjeta gráfica mejor, aunque también se puede dar el caso contrario, y que pagar más no significa ganar rendimiento.
Conocer nuestras necesidades
El siguiente punto a tener en cuenta es conocer nuestras necesidades, es decir, para qué queremos esa tarjeta gráfica. Está claro que si la queremos para jugar, deberemos elegir una que cuente con mayor potencia para sacar mayor rendimiento al juego. Hay que tener claro que a mayor requerimientos mayor precio tendrá la tarjeta.
Potencia que ofrece nuestra fuente de alimentación
A la hora de comprar una tarjeta gráfica, hay que tener presente su consumo ya que ese consumo lo tendrá que proporcionar nuestra fuente de alimentación, por lo que deberá estar preparada para ello. En este caso debemos tener en cuenta dos parámetros importantes: la potencia en vatios y el amperaje.
Para asegurarnos de que se podrá alimentar a la tarjeta sin ningún problema, los expertos recomiendan que estos valores sean el doble de lo que requiera la tarjeta.
Dimensiones de la tarjeta
Otro de los aspectos a tener en cuenta es la dimensión que tendrá la tarjeta. Puede parecer que no es importante, pero debemos asegurarnos de que entre bien en nuestra caja y así evitar posibles problemas. En este caso, debemos tener en cuenta el espacio interno del que dispongamos, el largo y el ancho de la tarjeta gráfica, así como el número de brackets para la instalación de esta nueva tarjeta.
Os recomendamos que os fijéis bien en las especificaciones tanto de tu actual caja como de la tarjeta gráfica que pretendes comprar para ver cuál es el largo máximo que admiten, y si tu caja no es de reducidas dimensiones el alto no debería ser, por norma general, algo de lo que debas preocuparte porque está más o menos estandarizado.
Salidas de vídeo
Por último, pero no por ello menos importante, hay que tener en cuenta las salidas de vídeo que necesitamos para conectar nuestro monitor. De poco nos servirá adquirir una tarjeta gráfica muy potente si al final no podremos conectar en ella nuestro monitor, a no ser que también optemos por cambiarlo.
Esperamos que estas claves os sean de gran ayuda a la hora de elegir vuestra tarjeta gráfica.