¿Por qué no comprar cargadores genéricos de iPhone? La respuesta es muy simple: la forma más fácil de evitar daños por cables de carga defectuosos es usar solo buenos cargadores. En un mercado saturado de accesorios de Apple, ¿cómo se pueden reconocer las diferencias?
La regla general es muy sencilla: hay que buscar accesorios con certificación MFi, que significa “Hecho para iPhone, iPod o iPad”. Esta etiqueta se puede encontrar en los paquetes de los complementos.
MFi es un programa de licencia que garantiza que todos esos accesorios de terceros están realmente diseñados para funcionar según las especificaciones de Apple. Sin embargo, nunca van a ser lo mismo que un cargador iPhone original.
El programa MFi se introdujo en 2005. En ese momento, la prensa denunció que se trataba de un intento de Apple de hacer que las empresas pagaran por el privilegio de fabricar accesorios para sus tecnologías.
Sin embargo, los altos mandos de Apple argumentaron que el programa era una forma de estandarizar la forma en la que los fabricantes de accesorios trabajan con los productos de la marca, al mismo tiempo que evitaba que los consumidores fueran estafados con malas imitaciones.
En estos días, arriesgarse a comprar un accesorio barato para iPhone realmente no vale la pena. Algunos de estos elementos son bastante inofensivos, como una correa de reloj o una funda para iPad que no sean originales. ¿Se van a arruinar los dispositivos con esos productos no aprobados por MFi? Probablemente no. No obstante, un cargador no certificado podría interferir en el buen funcionamiento de tu smartphone.
Razones para no comprar cargadores genéricos de iPhone
Un cable de carga de imitación puede causar daños graves. Eventualmente, un cable de carga defectuoso puede quemar un chip muy importante en su placa lógica llamado Tristar (o chip U2). El Tristar dañado afecta gravemente la capacidad del teléfono para cargarse correctamente.
Estos son algunos de los “síntomas” más comunes relacionados con un chip Tristar dañado:
- El smartphone no carga
- Genera una carga falsa (muestra que se está cargando con un rayo, pero el porcentaje no cambia)
- Figuran errores en iTunes que indican la interrupción del USB.
- La batería cae repentinamente de un porcentaje más alto a uno más bajo.
- La batería se carga a un cierto porcentaje y luego se detiene.
- La batería se agota en un momento repentino y el teléfono se apaga.
Es importante destacar que cambiar la batería o el puerto de carga no solucionará el problema, ya que el conflicto está en la placa base.
¿Por qué los cables piratas arruinan los iPhone?
Los cables MFi están diseñados para funcionar con un iPhone. El Tristar (o chip U2) regula la cantidad de energía que puede recibir la placa lógica del teléfono. Un cargador MFi de buena fe tiene lo que se llama un chip E75.
El E75 se encarga de asegurar que el teléfono no esté sobrecalentado, y luego le indica que continúe con la carga y que tome el voltaje. A continuación, este chip valida el mensaje con una contraseña secreta. De hecho, si conecta un cable que no tiene un E75, se podrá leer el mensaje “Accesorio no compatible” en el teléfono.
Cuanto más barato sea el cable de carga, es más probable que sea falsificado y que eventualmente dañe tu teléfono.
Si se cree que el teléfono ya se encuentra dañado debido a un cable defectuoso, la realidad es que no hay una solución, pues cambiar la batería o cambiar el puerto de carga no funcionará. Se puede decir que no tiene solución.
¿Qué quiere decir toda esta información? Antes de pensar en ahorrar unos cuantos pesos en un cargador, lo mejor es invertir para evitar futuros problemas mayores que podrían ser costosos o irreversibles. Cualquiera de estos dos panoramas saldría mucho más dinero que el que se ahorra al comprar un cable genérico.