Desde hace varias semanas me invadió la idea de que pronto sería prudente cambiar mi iPhone 4S por un equipo con Android de gama Media-Alta, dada la versatilidad y potencia de los equipos que están siendo presentados últimamente por otros fabricantes como Samsung y HTC. Por esa razón, estuve investigando durante varias semanas sobre cual sería la mejor opción: Galaxy Note, Galaxy S II, Galaxy S III, HTC One X… Incluso, el hecho de poder rootear estos equipos y tener la oportunidad de probar diferentes ROMs y aplicaciones, fue una de las principales razones por las cuales, según yo, podría sacarle más provecho a uno con un sistema operativo diferente.
Así mismo, darme cuenta que la Play Store cada día tiene más y mejores aplicaciones, me llamó poderosamente la atención ya que podría instalar en mi nuevo equipo prácticamente las mismas aplicaciones que utilizo cotidianamente en el iPhone. Sin embargo, esta idea se desvaneció en cuestión de 10 minutos gracias a que hace unos cuantos días, tuve la oportunidad y la fortuna de ver un vídeo que me hizo reflexionar sobre este cambio. Este vídeo proviene de una página norteamericana muy popular y que muchos de nosotros conocemos como Pocketnow. En dicho vídeo, sale un individuo que pregona que en su vida diaria utiliza 2 equipos, pero que su preferido sigue siendo el iPhone 4S por diferentes aspectos que ningún otro equipo ofrece.
Sus razones son diversas, pero no por eso dejan de ser válidas: Que si la estética del equipo sobresale del resto, que si su rapidez es notoria con respecto a otros terminales, que si incorpora una de las mejores cámaras para smartphones del mercado… En fin, un sinnúmero de razones que, en lo personal, me convencieron de que el iPhone 4S sigue vigente y se ha convertido en uno de los mejores smartphones del mercado aún en un momento en el que la competencia se ha esmerado en ofrecer dispositivos realmente atractivos y poderosos. Obviamente, no todo es miel sobre hojuelas: Menciona algo que todos sabemos: Los materiales con los que el iPhone 4S fue construido, dejan mucho que desear debido a su fragilidad. Aunque, bien menciona que esta fragilidad se puede subsanar utilizando accesorios de diferentes fabricantes que brindan protección.
Lo verdaderamente interesante, bajo mi muy personal punto de vista, está en las entrañas del propio equipo, además de que todo el ecosistema (accesorios, iOS, App Store), que lo rodea, lo hace todavía más atractivo y poderoso. Y es que, un smartphone de las características del iPhone, sin las aplicaciones disponibles de la App Store, se convierte en un móvil común y corriente. El saber elegir las aplicaciones que nos ayudarán a hacer nuestra vida diaria más sencilla, es realmente importante. Es reconfortante saber que en la App Store podremos encontrar todo tipo de aplicaciones y que éstas de una u otra forma, llenarán nuestras expectativas. Y precisamente aquí, es cuando, en gran medida agradezco a Apple que ejerza un control excesivo sobre las aplicaciones que se venden en su tienda virtual.
¿Porqué? Pues, sencillamente porque puedo tener la certeza de que el 99% de las mismas hacen lo que prometen. Si bien es cierto que a la fecha podemos encontrar charlatanes en la App Store, la gran mayoría de las aplicaciones han sido probadas y supervisadas por la gente de Apple. Por otro lado, esto no quiere decir que el iPhone 4S esté exento de inconvenientes. Uno de los principales, desafortunadamente es su pobre batería que en un día normal, al utilizar todos los servicios del iPhone al 100%, nos dejan sin energía en tan sólo unas cuantas horas. Otro gran inconveniente es que Apple no ha sabido implementar debidamente la multitarea, y eso, en lugar de ahorrarnos tiempo, nos lo quita.
Regresando a los aspectos positivos del iPhone 4S, no se puede negar que nosotros podemos aumentar el potencial del dispositivo de acuerdo a nuestras necesidades con tan sólo unas cuantas aplicaciones sin que el terminal deje de lado la sencillez que le caracteriza en su operación diaria. Definitivamente, los aspectos más importantes del iOS en general, son su simplicidad y su confiabilidad. Simple, porque cualquiera con mínimos conocimientos puede operarlo; y confiable, porque el terminal hace su trabajo como debe ser. Las actualizaciones del sistema operativo es otro aspecto a tomar en cuenta, llegan automáticamente a la mayoría de los dispositivos sin importar operadoras o países, el hecho de que una sola compañía sea responsable del iPhone, reduce al mínimo la tendencia a la fragmentación que Android sufre desde sus inicios.
Estas son las principales razones que me han hecho recapacitar sobre un posible cambio. Ahora mismo, creo que la mejor decisión será seguir utilizando el iOS como principal herramienta en mi vida personal y laboral, tal y como lo he hecho durante los pasados 3 años. A continuación te dejo el vídeo que me ha hecho cambiar de opinión (en inglés):
