Durante los últimos días están abundando los análisis sobre el uso y la cuota de mercado de los navegadores, después de la fuerte irrupción de Google Chrome para Mac, lo que implica inevitablemente que se compare con el navegador Safari entre otros. En la mayoría de informes hay importantes matices que se dejan de lado.
Cuando se habla de que Chrome ya supera a Safari, normalmente no se tiene en cuenta que la cuota de Safari está íntimamente ligada al sistema operativo del usuario, Mac OS X en este caso, que como todos sabemos es muy baja en comparación a Windows. Por extensión, Chrome supera a todos los demás navegadores porque simplemente se usan en muchos Windows del mundo, pero meter en esta misma unidad de medida a Chrome para Mac no es precisamente demasiado objetivo, porque simplemente son sistemas, mercados y usuarios diferentes.
Con estas bases es muy fácil que Chrome supere a Safari, aunque eso no quita que el día de mañana -recordemos que Chrome para Mac sigue siendo una beta- termine siendo realmente así. Es innegable que el navegador de Google ha puesto en jaque a Safari, y sobra decir que Firefox y el resto tendrán que ponerse las pilas. A la postre, la mayoría de informes, bajo mi punto de vista, no mienten… pero no dicen toda la verdad, y se sirve lo que hay de forma tergiversada.
Al fin y al cabo, y mirando fríamente como ha evolucionado el tema de los navegadores hasta el momento, podríamos decir que esta carrera nunca terminará.
