Piezas como la pantalla o la cámara son componentes de iPhone cuya adquisición al fin ha permitido Apple para suerte de los reparadores de smartphones. Sin embargo, no todos los elementos de uno de estos complejos dispositivos están siempre disponibles. Una estrategia de la marca para que recurramos a ella cuando queramos reparar nuestro iPhone. Pero que podemos evitar si sabemos cómo hacerlo.
Apple se abre a los reparadores
Como bien es sabido, Apple dispone de un cualificado personal de soporte técnico que mira con recelo cualquier intento de desgranar los entresijos de sus productos que tan encarecidamente se reservan. Hasta hace poco, reparar un producto de Apple por uno mismo era toda una odisea. Bien a causa de la dificultad, como también por la casi ausencia de componentes originales disponibles cortesía de la escrupulosa firma.
Afortunadamente, Apple anunció en 2021 que finalmente se abriría a terceros para facilitar las reparaciones. Por lo que los repuestos iphone y de otros productos de la marca californiana son cada vez más fáciles de encontrar en páginas especializadas. Pero Apple no acostumbra a poner las cosas fáciles. Y es que, si bien la disponibilidad de los repuestos es una realidad, la complejidad de su reparación es para asustarse.
¿Es difícil reparar un iPhone?
Reparar cualquier producto de Apple es difícil tanto a causa de su diseño como de su composición. Los mismos expertos advierten de que son necesarias herramientas muy específicas, ya que un iPhone, por ejemplo, cuenta con distintos tipos de tornillos en el interior y el exterior del dispositivo. Convirtiéndolo en un rompecabezas técnico que, sin embargo, tiene solución si vamos con cuidado y sabemos cómo hacerlo.
Añadido a ello, la complejidad de Apple da lugar a muchos problemas si la reparación no se lidera con conocimiento de causa. En ese sentido, cualquier error, por pequeño que parezca, puede causar fallos en el funcionamiento natural del dispositivo, ya que cada componente ha sido emplazado milimétricamente. Razón por la que es más que recomendable hacerse un pequeño esquema de cada pieza manipulada o movida.
No obstante, reparar nuestro iPhone no siempre es una batalla perdida, sobre todo en el aspecto económico. Ya que, a fin de cuentas, resulta mucho más asequible hacer la reparación por nuestra cuenta que recurrir al soporte técnico bajo los elevados costes que Apple fija para sus productos y servicios. Aunque otra dificultad es que Apple limita los repuestos oficiales, a pesar de que al menos permitió al fin su compra hace poco.
Estos son los componentes de iPhone que puedes reponer tú mismo
Sin entrar en las especificaciones totales su reparación, algunos de los componentes para iPhone que con más frecuencia se sustituyen son la pantalla y la cámara. Pero no por ello su sencillez es mayor. En el caso de la pantalla, por ejemplo, cabe destacar que, a fin de proteger el dispositivo contra el agua, ésta está sujeta con un fuerte adhesivo o pegamento, que debe retirarse con sumo cuidado para no romper otras piezas.
Por otra parte, componentes como la batería o los altavoces son más o menos fáciles de cambiar. Aunque nuevamente nos encontraremos con la problemática del adhesivo y el resto de piezas que no debemos tocar bajo ninguna circunstancia. En las tiendas de repuestos para Apple también podremos encontrar el lector de la tarjeta SIM, pero deberemos servirnos de una depurada técnica de microsoldadura para hacerlo posible.
Finalmente, otro de los repuestos que permite Apple es el motor de vibración. Una pieza sutilmente ubicada al lado de la batería y que, pese a sus pequeñas dimensiones, requiere de ciertas herramientas para cambiarse. Algo que, pese a su sencillez, también sucede con los botones del dispositivo. También reparables, pero que requerirán de mucha paciencia y, sobre todo, conocimiento sobre las entrañas de nuestro iPhone.
¿De verdad es tan complicado?
La calidad de los productos de Apple, así como su éxito en ventas, responde por sí misma a esa pregunta. Sin embargo, la realidad es que reponer una pieza de iPhone no debería demorarse más de una hora, según afirman muchos técnicos de la firma. Ahora bien, llegar a ese nivel conlleva pasar por formarse debidamente en la materia, especialmente en los componentes de Apple, para saber cómo lograrlo sin dificultad.
Por otra parte, siempre podemos aceptar el discurso de la razón y entregar nuestro dispositivo a Apple para que lo repare. Sin duda, la opción que recomienda la marca será la más acertada para eludir un desastre y otros gastos adicionales. O, si queremos ahorrarnos algo más de dinero, comprar los repuestos y, por su bien, entregarlos a un técnico de confianza que, con ellos, repare nuestro dispositivo lo mejor posible.