Aunque está más que claro que Apple es una de las principales compañías del mundo en lo que refiere al desarrollo de nuevos productos, y que de hecho la mayoría de ellos han alcanzado un éxito espectacular en el mercado, tampoco podemos dejar de señalar que otros no han tenido el apoyo del público que sus creadores hubieran esperado. Una clara muestra de ella fue, sin dudas, la poco recordada consola Apple Pippin.
En concreto, esta consola de videojuegos que ya desde su nombre puede ser considerada uno de los productos más absurdos de Apple, fue el dispositivo elegido por la firma de Cupertino para meterse de lleno en este segmento de la industria. Lanzada en momentos en los que la firma se encontraba en una transición entre la época de la Macintosh, y la próxima del iPhone, el éxito esperado por la Pippin nunca fue tal.
Sin Steve Jobs
Claro, una de las cuestiones que no podemos dejar de destacar acerca del lanzamiento de la Apple Pippin, es que por aquel entonces, Steve Jobs no estaba en la compañía pues había dejado la misma en 1985. su regreso se produciría recién dos años más tarde, en 1997, y con él se lanzarían al mercado más adelante los famosísimos iPod, iPhone y la tablet iPad.
Competidores de lujo
Una de las claves que podemos analizar hoy en día para entender la mala performance obtenida en el mercado por la Pippin, tiene que ver directamente los competidores que tenía en el mercado la consola de Apple. Entre ellas, claro, se encontraban las todopoderosas marcas japonesas Sega y Nintendo con sus propios productos, en momentos en los que además asomaba Sony con su posteriormente clásica Play Station.
Características de la Pippin
En cuanto a la Apple Pippin, debemos decir que la consola se destacaba por estar realizada en colaboración con otra marca japonesa, Bandai, y entre sus características, poseía un procesador PowerPC 603e a 66 Mhz.
