El desarrollador de Koncking Live Vídeo vió como su aplicación era rechazada de la App Store por utilizar APIs privadas; la aplicación permite el streaming de iPhone a iPhone, de forma que desde un terminal se pueden ver los vídeos que se mandan desde el otro, sin que sea necesaria la descarga. Ni corto ni perezoso, el desarrollador escribió a Steve Jobs invitándole a probar la aplicación, incluyendo en la misiva las virtudes de la misma. 24 horas después, la aplicación había sido aprobada y disponible en la tienda de Apple.
Está visto que la normativa se puede saltar a la torera cuando a Steve Jobs le gusta la aplicación previamente rechazada de la tienda. Está visto que el trato de favor se dispensa si al gran jefe le caes bien y le haces la pelota lo suficiente. Está visto que con este precedente, millones de desarrolladores intentarán escribir a Jobs si su aplicación es rechazada de la tienda, por si no hubiera ya suficiente jaleo con las oscuras normas de la empresa. Mal; muy mal. Pero ey, felicidades para el desarrollador que lo mas probable es que actuase de buena fe y sin malícia; una cosa no quita la otra.