Hace relativamente poco os explicamos que se habían localizado tarjetas iTunes falsas que se podían comprar a un precio mucho menor, pero que podían ser igualmente utilizadas para comprar en la tiendas de Apple en la red; poco después la compañía puso remedio al fraude, pero lo que difícilmente puede ponerle freno es a las tarjetas falsas ya vendidas.
Pues bien; resulta que algunos desarrolladores estan utilizando dichas tarjetas para comprar sus propias aplicaciones; es decir: usan tarjetas que les han costado muy poco para comprar sus programas a un precio real, y cuyos beneficios que Apple les desembolsa es también real, puesto que se basa en el 70% del valor por compra y descarga.
Si las cifras que se barajan alrededor de la estafa son reales, habría que sumarle lo que los desarrolladores podrían sacar de beneficio fraudulento al servicio a través de sus aplicaciones; todo a la postre, en perjuicio de Apple.
Vía | Arstechnica