De acuerdo al prestigiado diario The Wall Street Journal, Foxconn ha cerrado las instalaciones que se encargan de lustrar componentes electrónicos y productos terminados para dar paso a una investigación exhaustiva sobre las causas que provocaron una explosión que privó de la vida a 3 personas y dejó heridos a varios más. Este cierre es por 2 días y permitirá que el gobierno de China investigue a fondo las causas de la tragedia. Se espera que durante las próximas semanas haya más inspecciones por parte del gobierno.
En primera instancia, el probable causante del accidente fue un polvo flamable de aluminio que se utiliza para darle un cierto terminado a la carcasa trasera del iPad 2. Los peligros de la utilización de este polvo flamable ya eran por demás conocidos, toda vez que una compañía de investigación (Sacom), cuya sede está en Hong Kong, ha publicado diversos estudios al respecto. Además se ha sabido que en diversas fábricas (no sólo las de Foxconn) ha habido múltiples quejas de inhalación accidental del compuesto químico debido al pobre sistema de ventilación que impera en las fábricas en esa parte de Asia.
Esperemos que Foxconn salga bien librado de estas investigaciones y de paso corrija las anomalías que sus instalaciones presentan desde hace varios años. Hay que tomar en cuenta que esta compañía de origen taiwanés es la principal fabricante de componentes para la mayoría de los dispositivos electrónicos que hay disponibles a nivel mundial. Este accidente ha sido contraproducente para Foxconn ya que se caracteriza por contratar mano de obra extremadamente barata. Con esto, es muy probable que se vean obligados a contratar mano de obra mejor calificada y más cara para poder satisfacer las exigencias de uno de sus principales socios.
No sería nada extraño que a partir de esto, los competidores directos de Foxconn (Flextronics Inc. y Quanta Computer Inc.), hagan el intento por «robarse» a varios clientes y socios de la compañía.
Vía | The Wall Street Journal